Surgidos del crisol transcultural de París en 2012, el poderoso colectivo francés-argelino está considerado pionero del sonido electro-oriental, muy popular en Francia. Su objetivo es crear un espacio para la cultura árabe en la música electrónica contemporánea, espacio que a lo largo de diez años han creado, perfeccionado su estilo a través de colaboraciones y viajes por el Mediterráneo y más allá, rompiendo la barrera de los géneros, e inventando otros como la gasba argelina, el trance de anatolia, la dabkeh sintética o el raï biónico. 

Comenzaron sus carreras como DJ en clubes parisinos. Tras una serie de recopilaciones publicadas como EP, firmaron con Crammed Discs y publicaron su impresionante primer disco, «Musique de France», en 2016. Tras esto, el grupo actuó varios cientos de veces, en más de cincuenta países de cuatro continentes. Su segundo álbum, «Jdid», se publicó a  finales de 2019.

Sus últimos discos, ٣ (Tres), muy esperado por la crítica y la prensa, salió a la venta en febrero de 2023.

El primer disco de Acid Arab dejaba claro que la conexión entre las hipnóticas salmodias orientales y norteafricanas y los ritmos electrónicos seguía vigente. Después, en 2019, Acid Arab confirmaron su potencial con su segundo álbum, “Jdid”, una colección de perlas que combinaban el exotismo con la alquimia digital. La publicación del tercer disco de Acid Arab, que cuenta con la participación de ocho vocalistas invitados de Marruecos, Siria y Turquía, entre otros, como Cem Yldiz, Sofiane Saidi, Cheb Halim y Rachid Taha, confirma a este proyecto como una de las realidades más resplandecientes de la hibridación actual de raíces y cables, de sonidos étnicos y ritmos electrónicos. Su espléndido nuevo álbum les permite superar los límites y ampliar sus territorios musicales.