Esta instalación nace con deseo de desplegar un gesto constructivo y humano en la plaza de Santiago, a lo largo de toda la duración del festival.

Plaza mineral y sencilla, nos sedujo por el minimalismo de sus suaves curvas, la respiración que nos ofrece, el ritmo de sus cipreses y por la abertura de cielo que nos brinda hacia el Ebro.

Con Arcos hemos querido reconectar simbólicamente las curvas de la plaza de Santiago con el barrio antiguo de Logroño. Prolongando primero las curvas de esta plaza en tres círculos imaginarios y horizontales casi concéntricos – con su epicentro en frente al café Moderno y tocándose en sus costados en la Antigua Fabrica de Tabacos. Estos círculos imaginarios definen luego la curva de la instalación.

Respetando y poniendo de relieve la gran largura de la plaza, nos proponemos realizar una instalación de 40 metros de largo, de 3 niveles y dibujando 2 arcos suaves y verticales. Y así mismo hemos querido preservar el carácter despejado de este espacio usando los paneles del modo mas simple posible.

Intervención poética, abstracta y geométrica, Arcos es un inmenso castillo de naipes que se hace eco del ritmo de los cipreses, prolongando una perspectiva imposible hacia la fachada trasera de la Iglesia.

Este proyecto surge también de una estrecha y larga colaboración entre bailarines y carpinteros. Jordi Galí, director artístico de Arrangement Provisoire, compañía de danza y de proyectos para el espacio publico, invita a dos de sus colaboradores: el bailarín y bricoleur Jérémy Paon, y a Julien Quartier, cofundador – junto a Charles Robin – de De Facto, taller de ebanistería, de concepción de escenografías y de realización de proyectos de arte contemporáneo.