Eléonore Mueth Dubrule
El cielo es un cuadro vivo, grandioso y vibrante sobre el horizonte, que se despliega ante nuestros ojos, ofreciendo una paleta infinita de colores que despiertan nuestros sentidos y nutren nuestra imaginación. Desde el amanecer hasta el atardecer, nos brinda un espectáculo encantador, cambiante constantemente, revelando tonalidades y matices únicos en cada instante.
Así, el cielo es un artista en constante movimiento, pintando cuadros de colores cambiantes según las horas y las estaciones. Nos ofrece una sinfonía visual que estimula nuestra imaginación y despierta nuestras emociones. Ya sea el azul brillante del día donde las nubes blancas flotan esponjosas y ligeras, extendiéndose en todas las direcciones, cambiando constantemente de forma y color, desafiando las leyes de la gravedad, o los tonos encendidos como el naranja, rosa y púrpura, que incendian el horizonte, mezclando sus vibrantes tonalidades, el cielo nos recuerda la belleza efímera de cada instante.
Eléonore Mueth Dubrule se inspira en estas variaciones de luz y color que ocurren, así como en los cambios rápidos y dramáticos en las nubes. Este tema le permite dejarse llevar por la pintura como el viento entre las nubes.
Después de una carrera en la moda, ha realizado diferentes aprendizajes de técnicas clásicas de pintura al óleo. Desde la copia de los maestros clásicos como Corot, Rafael y Rembrandt, la técnica Van Eyck de «pintura al óleo al estilo flamenco», hasta la pintura conocida como «tempera». Estas técnicas tienen en común el uso de levaduras, que consiste en superponer finas capas transparentes de color sobre una superficie de pintura seca, lo que permite lograr efectos de profundidad, transparencia y luminosidad en la pintura. A partir de este recorrido, hoy les ofrece un trabajo que va desde lo figurativo hasta lo abstracto.
Para esta exposición, ha decidido aventurarse en formatos más grandes, aunque esté más acostumbrada a pintar en dimensiones más pequeñas.
Continúa desarrollando su técnica para capturar la belleza efímera del cielo.
